Nochebuena vegana antes de jugar en Navidad
Mientras buena parte del mundo futbolístico está esperando el parón por Navidad, en Israel estoy reviviendo mi etapa en Escocia e Inglaterra. Aquí el fútbol no para. El hecho de que haya ciudadanos de diferentes tipos de religiones provoca que la Navidad se viva de una forma distinta en esta zona. Por ejemplo, nosotros jugamos el 25 y 31 de diciembre, mientras que los trabajadores tienen días de fiesta selectivos. Según las creencias de cada uno, se pueden pedir días libres un sus respectivos trabajos un día u otro.
Respecto a lo que más cercano nos puede resultar, los cristianos, no hay duda de que celebran la Navidad. Estos días algunos barrios están decorados como numerosas ciudades europeas, hay algún mercado navideño y son miles de peregrinos y turistas los que viajan hasta Jerusalén para vivir estos días en Tierra Santa.
Debido a los entrenamientos y los partidos, nosotros no tenemos mucho margen para celebrar estas fechas, pero con mi amigo Víctor, que viene de Madrid a pasar tanto estos días como el ambiente de la Liga de aquí, nos juntaremos junto a mi compañero Aitor Monroy y su familia para intentar acercarnos un poco más a lo que vivimos en España. Debido a mi alimentación, sé que a veces no soy el mejor invitado posible y por ello debo agradecer a Miriam, la mujer de Aitor, que me tenga reservado un menú vegano para la cena de Nochebuena.
Mirando a otras religiones y a otros tipos de culto, lo cierto es que estas fechas no significan mucho para judíos o musulmanes por ejemplo. Ellos tienen otro tipo de celebraciones y actúan con total normalidad con una pequeña excepción, el Janucá.
Los judíos disfrutan durante ocho días de la fiesta de las luces, llamada Janucá. Este año coincide con los días de Navidad, ya que las luces se enciende desde el 24 de diciembre hasta el 31, pero no tiene nada que ver con la fiesta cristiana. Con esta festividad, los judíos celebran la derrota de los helenos y la recuperación de la independencia judía. La costumbre dice que hay que encender un candelabro de nueve luces de forma progresiva debido a que, según la tradición, se produjo un milagro en el que se encendió un candelabro durante ocho días consecutivos en el segundo templo de Jerusalén cuando el aceite con el que se contaba sólo alcanzaba para un día.
Así, sean cuales sean las costumbres o religiones de cada uno, desde aquí me gustaría felicitar la Navidad a mi familia de España y a mis amigos de Inglaterra y desear que todo el mundo pueda disfrutar de sus seres queridos.
Os recuerdo que podéis seguir mi carrera o hablar tanto de mi aventura en Israel como de mi alimentación en mis redes sociales. Os espero en Twitter, @cuellar24, Instagram, @cuellar24 y Facebook www.facebook.com/CarlosCuellarOficial.